Religión y Otra Espiritualidad

por Ed René Kivitz

¿Cuál es la diferencia entre espiritualidad y religión?

La espiritualidad es la experiencia humana de lo sagrado, trascendente, divino. La religión es la manera como el ser humano organiza y vivencia esta experiencia. Espiritualidad es una experiencia humana universal. Religión es una experiencia humana condicionada a dogmas, ritos, códigos morales y grupos de personas que creen en las mismas cosas y celebran su espiritualidad de la misma manera. Las religiones más conocidas en el mundo son: Judaísmo, Islam, Cristianismo, Hinduismo y Budismo. La espiritualidad es lo que los seres humanos tienen en común. Por ejemplo, tanto el Dalai Lama como el Papa Benedicto XVI tienen una espiritualidad, pero tienen creencias diferentes. Uno es budista y el otro es cristiano. En términos simples, así como el ser humano tiene corporalidad (relación con el cuerpo) y racionalidad (relación con la mente), también tiene espiritualidad (relación con las realidades espirituales). La religión es la manera como cada ser humano desarrolla y practica su espiritualidad.


¿Por qué “otra espiritualidad”?

Dentro de cada religión existe una variedad de formas de vivenciar la espiritualidad. Por ejemplo, en el Cristianismo la espiritualidad puede ser vivida de una forma Católico Romana y otra Protestante, e incluso dentro del Protestantismo existen ramificaciones como el protestantismo histórico, el pentecostalismo y el neo-pentecostalismo. En Brasil, los protestantes quedaron conocidos como “evangélicos”. Significa que, “evangélico” es una rama del protestantismo, que a su vez es una rama del Cristianismo, que a su vez es una de las cinco grandes religiones. Ser “evangélico”, por lo tanto, es una forma de vivir la espiritualidad cristiana, y en ese caso podemos decir que existe una “espiritualidad cristiana evangélica”. Por detrás de la expresión “otra espiritualidad” está la sugerencia de que existe otra manera de vivir la espiritualidad cristiana, diferente de la manera como los evangélicos la viven. En verdad, el libro* busca demostrar bajo varios enfoques, que la “espiritualidad evangélica” está cada vez más distante de lo que puede considerarse una “espiritualidad cristiana”.

* en este caso el blog (N. del T.)